Situada en un precioso valle en el sur de las montañas del Maresme, esta casa ha sido diseñada para captar las magníficas vistas sobre la cordillera litoral y sus bosques de pinos y encinas.
Los clientes, una familia escandinava, querían crear una vivienda de vacaciones con espacio para sus hijos e invitados: un espacio contemporáneo, único y confortable con una atmósfera acogedora para el descanso.
La casa está planificada como dos volúmenes distintos conectados por una gran terraza con la piscina y el jardín frontal.
La vivienda principal es un cuerpo alargado de dos plantas que contiene la vivienda principal orientada a la terraza. El volumen secundario aloja el garaje y la casa de invitados. La casa está planificada como dos volúmenes distintos conectados por una gran terraza con la piscina y el jardín frontal.

El diseño interior gira en torno a la búsqueda de los propietarios de un espacio con un lujo calmado para descansar y disfrutar las vistas. En ambas plantas, un largo pasillo a lo largo de la fachada principal conecta los espacios formando un eje a través de toda la casa. La luz natural entra a través de amplios ventanales y un patio central.
La planta de calle se compone del salón con una zona de comedor integrada y la cocina, separados ambos por un vestíbulo de entrada que contiene la escalera. La planta superior está compuesta de tres habitaciones y una zona de juego infantil con la suite principal en el lado opuesto de la planta.