YLAB Arquitectos, Cliente privado, Fotos: YLAB, Eugeni Pons
El proyecto consiste en la rehabilitación integral de una vivienda unifamiliar y sus espacios exteriores en el área de Bellaterra, una bonita área residencial en las inmediaciones del parque natural de la Collserola, cerca de Barcelona.
Sus propietarios, una familia amante de los espacios amplios y luminosos, adquirieron la finca por sus vistas excepcionales, pero tuvieron claro desde el principio que necesitaban una rehabilitación radical que transformara la casa y su entorno.
La finca original, situada en una parcela de pendiente pronunciada, contaba con una edificación de 442 m2 formada por un volumen de dos plantas más sótano y un anexo de una planta. Tanto el jardín como la casa, presentaban problemas fundamentales que había que solventar.
Por una parte, la casa tenía una volumetría de fachada de obra vista irregular y angulosa, con porches yventanales de dimensiones desiguales y escasa apertura al exterior. Por otra parte, los espacios exteriores estaban mal planteados, con un jardín posterior que estaba a un nivel inferior al de la casa y acababa en una pendiente tan fuerte que lo hacía inutilizable. Por último, la distribución interior era angosta y oscura, con muchas estancias de tamaño insuficiente y largos pasillos.
La propuesta plantea en primer lugar la unificación del aspecto exterior de la vivienda. Para ello se igualan las dimensiones de los porches y ventanas existentes y se abren nuevas ventanas.
La fachada frontal orientada al norte, casi ciega y con un porche estrecho e inútil, requería una intervención radical. Para ello se adelanta el plano de fachada eliminando el porche longitudinal existente y agrandando el espacio de la sala. En su lugar se crea un gran ventanal de más de 13 metros de longitud en madera de Niangón, que integra la zona de acceso a la vivienda y conecta la sala con el jardín.
En la parte posterior, se crea una serie de terrazas exteriores planteadas como una extensión de la edificación. La primera, al nivel de la planta baja y revestida de piedra natural abujardada Sabbia, se sitúa semivolada sobre la zona de asoleo en madera maciza de Ipé y una piscina desbordante.
Desde esta plataforma, una escalinata en la misma madera desciende al jardín, junto al muro de piedra de la piscina.El jardín se transforma en una serie de terrazas descendentes, resueltas de forma que se suaviza la fuerte pendiente y hacen todo el jardín transitable.
En cuanto a la distribución interior se opta por el vaciado del interior y se plantea un nuevo programa funcional contemporáneo; creando espacios amplios formados por distintos ambientes interconectados, con vestíbulos situados en el centro de la planta para acoger el acceso y la comunicación vertical, uniendo los espacios a ambos lados sin necesidad de pasillos.
En la planta baja, están la sala y el comedor, sutilmente separados por una enorme chimenea de piedra abujardada Sabbia, al fondo de los cuales se encuentra la cocina. La sala se abre a la terraza posterior mediante un sistema de hojas correderas que se ocultan totalmente en la propia fachada, de forma que el frente quede totalmente abierto. Por el otro lado se abre al jardín frontal mediante el ventanal de madera, bañando la sala de luz y creando visuales que recorren la parcela de un extremo a otro.
En la misma planta, al otro lado del vestíbulo de acceso, la zona familiar comprende un aseo con ducha, una sala de televisión, un despacho y una sala de música separable del resto mediante dos grandes correderas.
En la planta superior se encuentran los distintos dormitorios familiares, separados por un vestíbulo central convertido en sala de ocio para los hijos de la familia. El dormitorio en suite está formado por un vestidor, un despacho y un dormitorio con baño y terraza propia.
Los acabados interiores son el pavimento de piedra caliza Sahel pulida, que refleja la luz aumentando su intensidad; las paredes están acabadas en color blanco marfil; y las carpinterías interiores se realizan en madera lacada satinada color blanco marfil o madera tropical de Etimoé, con elegantes betas anaranjadas que aportan un punto de calidez en contraste con los tonos blancos y brillantes.
de Teixidors, de la tienda Matèria
de Maòli, de la tienda Matèria
de Secto Design