Esta vivienda unifamiliar está situada junto a un antiguo muro, visible desde el interior de la casa, en contraste con la vista desde la fachada opuesta, amplia y lejana. El volumen alargado con fachada vidriada de la vivienda, paralelo al muro, realza este contraste entre estos elementos.
La casa mantiene una relación singular con el solar: enterrada por un costado, volada por el otro, horizontal frente al paisaje y discreta en el patio. El autor de este proyecto es el arquitecto Peter Grundmann, quién colabora con YLAB arquitectos desde el 2009 en el desarrollo conjunto de proyectos privados de vivienda.